9.6.07

"Un año sin amor" en Colombia

Sadomasoquismo, sida y soledad

Nota publicada en El Tiempo.com, con motivo del reciente estreno de "Un año sin amor" en Colombia.


El actor argentino Juan Minujín es el protagonista de 'Un año sin amor', de la realizadora Anahí Berneri.
"Esta es una historia sobre la soledad y la búsqueda del amor", precisa la directora.
Esta producción, que ya está en la cartelera nacional, se inspiró en la novela autobiográfica de Pablo Pérez.

"1:76, 64 kilogramos, 30 años, VIH positivo... Listo". "No. Mejor no". "Pablo. Pasivo. VIH positivo. Intelectual. Busco de 18 a 30 años. Fines serios". "No. Tampoco". "Pablo. Intelectual. Busco de 18 a 30 años. Fines serios"... "Este menos".

Escudado tras la tinta y el papel de un aviso clasificado, Pablo Pérez intenta encontrar el amor. Gay, VIH positivo, joven, escritor frustrado y malditamente solo, Pablo espera que si bien no encontrará jamás la cura para su enfermedad, por lo menos algún paliativo en una relación de pareja. Eso, cree, al menos le ayudaría a sentir ganas de prolongar su vida un poco más. Eso, piensa, lo fortalecería, aunque fuera anímicamente.
Para encontrar ese apoyo emocional, estará incluso dispuesto a hundirse en el mundo sadomasoquista de Buenos Aires.

Pablo es el protagonista de Un año sin amor, la exitosa ópera prima de la directora argentina Anahí Berneri, con la que logró, el año pasado, el premio Teddy, al cine gay y lésbico, en el Festival de Cine de Berlín. Anahí, vía telefónica, cuenta que se inspiró en la novela homónima del mismo Pablo Pérez, un joven escritor de Buenos Aires.

¿Por qué debutar como directora de cine con un tema tan espinoso?

Lo que pasa es que cuando la historia llegó a mí, venía trabajando en la producción de un programa de televisión gay. Gracias a él, conocí al autor de la novela, en una entrevista. La verdad es que me impresiónó mucho su libro y él mismo. Su historia me pareció muy sincera y muy bien pintado el mundo gay de Buenos Aires. Sentía que tenía una sensibilidad muy fuerte, que iba más allá de los temas espinosos. Más allá del sida, del sado, de la homosexualidad había una persona con ideales muy hondos y mucha humanidad.

¿Cómo fue el trabajo con el autor de la novela?

La escritura del guión fue compartida. Me nutrí muchísimo también de él, siendo una novela autobiográfica. Por otro lado, también me tuve que alejar para poder crear mi propio personaje. En algunas cosas, por ejemplo, no estábamos de acuerdo. En la película hay una cierta mirada romántica, femenina... y eso se nota. Además, si lo hubiera tenido a él al lado, permanentemente, habría sido un lío para que se mostrara a él mismo en la película, porque a veces es difícil ser piadoso con uno mismo.

¿Cómo hizo para balancear el drama con el contenido sexual del filme?

Para mí es entender que la sexualidad es parte del ser humano. Me parece que la película pasa por ahí, claro. Y que el personaje está viviendo ciertas circunstancias que lo llevan a buscar en otros lugares el amor, la cura, la redención que precisa. Esta es una búsqueda de una cura para la enfermedad, pero también para la soledad. Es como un pensamiento mágico: si encontrara el amor o dejara de estar solo, se salvaría de su enfermedad o de la muerte. Más que sobre sexo, esta película es sobre la búsqueda del amor.

¿Cómo fue su aproximación al mundo gay de su país?

Contactamos a la gente del Club Leather (cuero) de Buenos Aires, varios de ellos participaron en la película. Me dejaron entrar a su club, pero primero disfrazada de hombre, porque no se admiten mujeres. Luego, pude hacerlo con más libre acceso. Me quedó fácil, porque entonces tenía el pelo cortito.

¿Cómo recibió el filme esa misma comunidad?

Pensé que íbamos a tener mucha resistencia. Pero fue todo lo contrario. Fueron muy colaboradores y participaron en todo lo que les solicité a medida que fue avanzando el proyecto.
La realizadora del filme

Anahí Berneri, de 32 años, nació en Buenos Aires, donde ha desarrollado, prácticamente toda su carrera cinematográfica.
Fue directora del corto 'Modelo para armar' (1997). Ya se encuentra rodando su nuevo filme, 'Encarnación', que, adelanta, será sobre la historia de vida de una 'vedette'.

'Un año sin amor' se desarrolla en 1996, un momento científico muy importante en la investigación del tratamiento del sida.

El director de cine argentino Daniel Burman, a quien recordamos por 'El abrazo partido' y 'Derecho de familia', fue productor de 'Un año sin amor'.

JIMMY ARIAS
REDACTOR DE EL TIEMPO